La idea es aprovechar la capilaridad y cercanía a la población de la red de farmacias para poner a disposición de los pacientes, especialmente de los que están más alejados de los núcleos urbanos –para algunos, el hospital más cercano está a 100 km-, un profesional sanitario que pueda ayudarle a entender mejor y acompañarle en el manejo y control de su enfermedad. “Muchos de los tratamientos empleados son muy complejos, se toman por largos periodos de tiempo y tienen efectos secundarios, factores todos ellos que dificultan la adherencia, y generan angustia, ansiedad o dudas al paciente”, explica Antonio Mingorance, presidente del CACOF. “A veces, basta con tener cerca un profesional sanitario al que sabes que puedes acudir, que va a contactar si hace falta con tu médico ante cualquier duda, o simplemente que puede mejorar desde la indicación farmacéutica muchos aspectos como la alimentación o el aspecto físico”.

El programa de formación diseñado por el Consejo Andaluz y Janssen ha sido impartido por profesionales médicos de las unidades de Urología y Oncología de los principales centros hospitalarios de la región, y en él han participado más de medio millar de farmacéuticos. “Los pacientes con cáncer de próstata suelen ser mayores y polimedicados, por multipatologías propias de su edad, con lo cual las interacciones farmacológicas han de ser seguras. Ante situaciones como ésta juega un papel esencial el profesional farmacéutico, además de para ayudar al paciente en la cumplimentación de los variados tratamientos de sus múltiples enfermedades”, señala el Dr. Francisco José Álvarez, del Servicio de Oncología del Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva y ponente en este curso.

El cáncer de próstata es el más prevalente entre los varones españoles y el segundo con mayor índice de mortalidad, contabilizándose más de 22.000 casos cada año. Pese a los altos datos de prevalencia, el cáncer de próstata puede ser curado en un 90% de los casos gracias a un proceso que requiere la intervención de un equipo multidisciplinar de profesionales sanitarios entre los que se encuentran los farmacéuticos, ya que la patología tiene una evolución desde el diagnóstico cercana a una década, en la que intervendrán distintos especialistas, todos ellos implicados en proporcionar la mejor opción terapéutica y conseguir la mayor supervivencia con la mejor calidad de vida posible. Es por ello que el programa formativo ahonda en aspectos como la detección precoz de la enfermedad, las bases del tratamiento loco regional y sus posibles efectos secundarios, la aplicación de tratamiento de radioterapia y hormonoterapia para cuadros extraprostáticos que no hayan creado metástasis, así como el protocolo de seguimiento del paciente una vez aplicado el tratamiento y ante la aparición de la recidiva. Por último, se realiza también una actualización sobre cáncer de próstata avanzado y nuevas terapias.